miércoles, 13 de junio de 2007

"Otro ejemplo"

En una etapa de nuestra vida que preferiríamos olvidar (pero somos constitutivamente incapaces de olvidar nada que concierna nuestra vida galante), nos dio por conocer chicas a través del chat (y que rápido envejecen ciertas palabras modernas, ¿no?; hoy decir "chat" te agrega más años que decir "Bolivia" y casi tantos como decir "Kiorastami").

"Ejemplo"

"La solución a la inseguridad disminuirá cuando haya políticas sociales activas reales"

domingo, 10 de junio de 2007

Para el aburrimiento y la mala onda recomiendo...

Leí por segunda vez un divertidísimo libro que en absoluto parece escrito en 1836, sobre todo para pasar un buen rato, "Los papeles póstumos del club Pickwick" de Charles Dickensen una historia disparatada y cómica narrada con un sentido del humor impagable.

jueves, 7 de junio de 2007

El peronismo rancio y emotivo



El peronismo huele a polillas, y no. Es antiguo y recalcitrante, y no. Hay un sustrato simbólico, que emociona profundamente, o no. Esa entelequia vaga que para gente de nuestra generación sólo puede ser literatura y para nuestros padres un recuerdo vago de la infancia: la muñeca o el camión de la Fundación Evita. Y si siempre el peronismo fue una confusión, una especie de doloroso malentendido, a medida que pasen los años sólo podrán complicarse las cosas, tanto las imágenes de lo que el peronismo alguna vez fue, como el camaleónico peronismo reinante. El peronismo que es el hada buena de Evita, la truchada y la violencia política desatada. El peronismo actual que puede ser tecnológico, moderno o marketinero.
Lo que es indudable es que así como el peronismo moldeó de forma caprichosa la cultura política argentina, también tiñó nuestra literatura. Y muchas de sus mejores o peores páginas lo evocan, lo analizan, lo increpan, lo denostan, lo plasman...
(Extraído de SIBELIUS)

Las personas...¿cambian con los años?

Ayer, LD, un colega cumplio 45 años. El equipo de trabajo, se lo festejamos compartiendo unos bocaditos dulces y salados más algunas gaseosas. A la mitad del evento, entre bocado y bocado, LD, emite su tan consabida frase anual. "Cada año, el dia de mi cumpleaños, invito a reflexionar sobre algun tema". Otra colega recuerda; si, el año pasado tiraste el tema de la familia. LD acota: "Las personas...¿cambian con los años?"...